Cuando hablamos de simulación gerencial estamos frente al reto de hacer que el individuo se aproxime de la manera más cercana a la realidad del gerente y ello no sólo involucra la toma de decisiones sino también la interpretación y la asimilación de la cotidianidad del mismo El uso de la simulación en la formación empresarial permite acelerar el proceso de aprendizaje (Peter Senge destaca que las personas aprendemos mejor mediante la propia experiencia, o el modelo clásico de “aprender haciendo”, de David Kolbe ), y contribuye a elevar su calidad. Y esto es particularmente eficiente en la formación de directores de proyecto, debido a la diversidad de conocimientos y habilidades que esta materia conlleva.
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